martes, septiembre 16, 2008

Grito de Independencia


Estuve el domingo en la celebración de la Independencia, evento que aquí fue “organizado” por el Consulado de México.


He aquí la información:

Yo llegué como 5:30 a las afueras de la Biblioteca Pública de Vancouver –ahí fue la celebración-; estaba una Estudiantina cantando con su típico estilo, mismo que realmente nunca he amando, pero al escuchar canciones que uno conoce, pues comencé a fascinarme. En ese momento había unas mmm 200 personas, no tengo idea porque soy mala para calcular, pero más de 100 sí había.


Después del show de la Estudiantina, seguía supuestamente un Marichi junto con danzas tradicionales, luego el Himno de Canadá, en seguida el de México y después todo se veía confuso aún cuando había un programa, mismo que a esas alturas ya estaba por completo desfazado.


Desde lo del Mariachi, esos eventos iban a ser dentro de la biblioteca, entonces, apenas terminó la Estudiantina, todos nos amotinamos para entrar a la Biblioteca -ajja bueno, yo relamene no pude hacer mucho porque no corrí hacia la puerta-: 200 personas tratando de entrar por una puerta como la que todos tenemos en nuestras casas. Los pobres de seguridad canadiense tratando de poner orden, sin comprender nada de español, la gente empujando... entonces cerraron la puerta. Yo estaba afuera, hasta atras con Morgan y mi amiga Adriana, de pronto, alguien que también estaba afuera comenzó a “pedir posada” y todos seguimos la canción.

(ajjaja Morgan y todos los demás extranjeros, sin saber qué demonios pasaba o cómo actuar)

Como ya no había ninguna clase de control, mandaron otra vez a los pobres de la Estudiantina a que volvieran a amenizar y calmar a todos, pero la gente seguía como loca gritando “Mariachi, mariachi, mariachi”, y nadie daba ninguna explicación.


El Cónsul, para trata de mantener el orden, salió con una caja de cartón que decía SRE, y estaba llena de matracas de maderita –las verdaderas- que tenían pintada la bandera de México, obvio, la gente se volvió a amotinar y arrebatar las matracas. Ajajjaja Morgan diciéndome “Pero esa señora ya tiene tres, para qué quiere más”, el pobre no comprende el comportamiento de los mexicanos.


Después de horas, salió el mentado Mariachi con el grupo de Danza. La verdad es que ambos eran realmente malos, pero cuando uno no tiene nada de eso aquí, y posiblemente no lo vuelva a tener hasta dentro de un año, pues cualquier cosa causa fascinación. Ahhhh, todo esto sigue siendo afuera de la Biblioteca, jjajaja


Cuando iba llegando el mariachi, el Cónsul –nuevo error- sacó una caja con paliacates verdes, y la gente volvió a amotinarse para conseguirlos, y aunque el pobre hombre dizque quiso ponerse serio y establecer orden, ajajja nuevamente fue rebasado por la masa de mexicanos.

Tocó el mariachi, bailó el grupito, y luego de la nada, sin más ni más, estaba en medio de la explanadita el Cónsul con la bandera de México dando el típico grito y todos como locos gritando “Viva”.

Pequeñas conclusiones:

  • No había que reflexionar mucho para darse cuenta que efectivamente el evento había sido orgnizado por México, ajjaja esto, porque la organización era realmente mala, si no es que nula.
  • Lo anterior es una verguenza, porque es el Consulado de México en Canadá organizando este evento, no se trata de la oficinita de Haití organizando un evento de este tipo, bueno, sé que me entienden. (Ustedes con sus impuestos en México financieron esta fiesta)
  • Los pobre de la Estudiantina, materialmente fueron EXPLOTADOS.
  • No sé porqué decidieron hacer estas celebraciones afuera y dentro de la Biblioteca Pública de Vancouver; nadie nunca midió las consecuencias de que la gente en México sí grita, sí celebra, sí canta, sí se divierte, etc.
  • Morgan me dijo : “desgraciadamente, este evento confirmó estereotipos”, cosa cierta
  • A pesar de todo, fu feliz de estar rodeada de gente que hablaba Español, con alegria, sonriente...
  • Por supuesto que estuvo el fulanito que gritó “Viva México cabrones” ajajjaa los hay en todo el mundo.
  • Hicimos varias veces “la ola” esperando al mariachi.
  • Todos los extranjeros ahí, eran esposos, esposas, amigos de mexicanos, y absolutamente todos con caritas de admiración y en ocasiones de susto, sobre todo los asiáticos.
  • Después de grito siguió una trifulca para entrar a escuchar el Himno Nacional dentro de la Biblioteca, yo conseguí entrar, canté el himno y decidimos irnos a cenar porque el caos y la falta de organización seguía.


Notas: En la foto, donde se ve el hombre caminando es la explanada donde todo acontenció; las matracas que se regalaron, son justo como las de la imagen.

2 comentarios:

Dama Bizarra dijo...

jajajajaja! me fascinó la pregunta de Morgan ¡es verdad! ¿para ké la dama kería más matracas? oh sí...somos un pueblo muy simpático.

Anónimo dijo...

Hola

Me da gusto que hayas tenido una celebración aunque esta haya sido un poco mediocre, pero com dices despues de un año de estar por allá cualquier cosa te parece divertida, las matracas aqui las regalaban si comprabas 30 pesos de productos sabritas a la salida de los supers, Gobita consiguió una peluca de peluche tricolor, jajaja, que bueno que te divertiste un rato. TQM