Prueba de que ya me estoy sobre-adaptado es que justo ayer vi esas cafecitas pero con tonos de rosa o azul, ya no recuerdo, y no me parecieron tan feas como el año pasado, y ahora que sigo viendo la imagen ajjaja creo que ¡ya me gustan!
Además, aquí uno puede ponerse cualquier garra de ropa y salir a la calle, y en mi caso, por tener el cabello negro y color en la piel la gente te ve como la reencarnación de Frida Kahlo jajajaj. Hoy por ejemplo, un ruquillo en el súper, para congraciarse conmigo me dijo: “ahhh, qué bonito color de vestido” jajaja y aún cuando sea invierno, si me pongo este vestidito veraniego con mallas y ese asco de botitas, sé que, de toparme con el mismo hombre, igualmente querrá congraciarse.
En fin…es un hecho que les terminaré dando oportunidad a esas botitas. Pero a las de arriba, no a las de abajo.
2 comentarios:
Hola
Tiene sus ventajas vivir en otro lado en donde la gente no te critica ni te juzga, en cambio que tal acá en Puebla, especificamente en el Colegio Americano, en donde muchas mamás creen que van a un desfile de modas, y aparte peor en Puebla que ya sabes que son de lo peor en cuanto a tu vestimenta, en cuanto a las botitas de la parte superior, no me parecieron tan feas, pero por favor no te pongas las de abajo ok?, R E S P E T A T E OK? tqm
Ay Dios! Las botitas cafés están di-vi-nas! De verdad, yo ya las hubiera comprado de inmediato =)
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