Nombres

Las mujeres aquí pueden nacer con un nombre y morir con otro.

Ya sé que en México también existen los juicios de cambio de nombre; mi abue tuvo que enfretar uno, y fueron mil y un problemas, incluso hasta la fecha no sé cual es nombre completo y verdadero de mi abue jajaja

Pero a lo que quiero llegar es que, muchas de las mujeres canadienses estan en contra de cualquier labor del hogar; algunas buscan la equidad, y otras, como ya he comentado sólo abusan, pero no renuncian a la costumbre de cambiar de nombre, de adquirir el de sus esposos.

Yo apoyo absolutamente la equidad, considero que así deben construirse las relaciones en pareja, y a mi parecer el cambio de nombre es una costumbre un poco arcaica que no forma parte de las relaciones modernas -no tienen que estar de acuerdo conmigo, sencillamente es lo que he percibido-.

Aquí no se usa el posesivo cambio de nombre. Aquí nunca sería yo Silvia Vasconcelos de Pendleton, sino sencillamente Silvia Pendleton, nunca sería de nadie ajjaja. Si quisiera cambiar mi nombre aquí, lo haría con todos los trámites legales, y al morir, moriría como alqguien más, como alguien que nunca nació...¿no es una monstruosidad? Lo que se usa en México es más bien un cambio falso de nombre que dificilmente se asienta en documentos oficiales.

No sé...me parece contradictorio que muchas mujeres que se quieran sentir liberadas, profesionistas, dueñas de su vida, sigan cambiando su nombre al de sus esposos. No digo que esté mal, cada quien es libre de hacer y deshacer lo que quiera con su nombre, sencillamente me parece dificil de comprender.

Hoy, el 25 de junio de 2009 no tengo la más remota intención de cambiar mi nombre; ¿lo haré algún día? ¡Tal vez! Aunque lo dudo