Dije que sí y otros datos curiosos

En Coyoacán el jueves 27, 2010. Tomada por Ricardo.

Hoy hace dos años decidí casarme con Morgan y para el otro mes será nuestro segundo aniversario;  cual vil anciana tengo qué decir ¡qué rápido pasa el tiempo! 

He decidido que hablaré un poco más sobre este tema hasta que sea mi aniversario, así que aquí escribiré algunas cosas que hacen que Morgan sea lo máximo; estos datos están únicamente relacionados  con nuestro viaje a México.

1. En las casetas de cobro de las carreteras hay toda clase de vendedores. Se puede uno topar con gente vendiendo camotes, periódicos, perros, duraznos, cajas de mango, talacheros, etc. Morgan, quién no tenía idea lo que esta gente quería se preocupó porque pensó que los vendedores necesitaban ayuda y estaban siendo ignorados por todo mundo.

2. Se fascinó cuando vio por primera vez lagartijas "en estado salvaje" ajjajajaja

3. No comprendió:

• la forma en la que la mujer mexicana trabaja sin descanso

• el  hecho de que los camiones del transporte público tuviesen siempre todas las puertas abiertas

• por qué la gente tocaba tanto y de esa manera el claxón

• por qué la gente, a diferencia de Vancouver, se vestía tan bien y combinaba la ropa

• los gritos de los que venden el gas, el agua, los tamales, pan, empanadas...

• por qué si la gente manejaba tan mal, existe un porcentaje verdaderamente alto de gente sin seguro en los coches

• el cómo pudo vivir 33 años sin saber de la existencia de la sopa de fideos, las chalupas y los eltores callejeros

• por qué las banquetas estan en esas condiciones

Hay cosas que por ahora se me escapan, pero es que el inocente, con su cara de bondad y tratanto de ayudar a todo mundo era lo máximo, y eso, entre muchas otras razones más, me hace amarlo tanto.