Apenas le conté a Morgan lo siguiente:
Silvia: ¿Te acuerdas que te conté de una mamá de la escuela que era bien sangrona? Pues yo creo que ya tiene un amante.
Morgan: ¿Qué? ¿Cómo que un amante?
Silvia: Sí, no hay otra explicación. Por meses nunca me saludó, y eso que su hijita Gina es una encajosita, es más, ni se sonreía conmigo (En esa familia los únicos buenos son el papá y el abuelo), y de pronto, de la noche a la mañana es súper amable, hasta me quiere hacer la plática, sonríe, ya sabe que soy de México... Y todo es porque tiene un amante, estoy segura.
Morgan: ¿Cómo puedes estar segura?
Silvia: Porque lo estoy, mi teoría es cierta, trata de pensar en cambios bruscos en el ánimo de la gente; tengo toda la razón.
(Morgan sólo se rio y no cree mi teoría, bueno, yo creo que en el fondo me apoya ajjajajaja)
1 comentario:
Hola
Tu teoría no tiene ningún fundamento, tu no sabes si tenía algún problema grave, y al fín se resolvió, y no precisamente con su esposo ok?
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