Mi nueva motivación del mes: comenzar a correr.
He aquí mi historia con el deporte:
Kinder: El ejercicio básico supongo, nada avanzado, pero tampoco problemas de coordinación gruesa.
Primaria: No destaqué en deportes, pero recuerdo que un tiempo no fui del todo mala en basketball, según yo “entrenaba” al terminar la escuela y los sábados por la mañanas –a las 8:00 am-. Mis profesores de basket: Rafael y Power (jjajja este último inolvidable por su color y complexión) y menciono sus nombres para hacer más creible esta historia. En fin, luego de mi básico –más no malo- desempeño con el basket, todos los días en cuarto año de primaria al terminar las clases iba a nadar con mi amiga Sandra a la alberca de la escuela, aún recuerdo nuestros pequeños “retos” de correr y aventarnos a la alberca sin sentir lo helada que estaba el agua, pero lo más memorable de esos días que nadaba es que, cuando me quería salir de la alberca, no utilizaba la escalera, me impulsaba y me sentía Ariel -"La Sirenita-“ cuando está en las rocas cantándole a Eric.
Creo que esa fue toda mi actividad deportiva en primaria
Secundaria: Realmente nula ajjajaja únicamente lo concerniente a Educación Física; cabe aclarar que dos años de secundaria los hice en el DF, donde la calidad de la clase era pésima.
Preparatoria: Si en secundaria fue casi nula, en prepa prácticamente no existió. En mi segundo semestre de preparatoria –mismo que estudié en el DF- tomé una clase absurda y asquerosa de “iniciación deportiva” donde el maestro nos ponía a correr como idiotas alrededor del campo para luego hacer otros ejercicios asquerosos, pero eso no es lo peor, lo espantoso radica en que inmediatamente después, tenía una clase de razonamiento, que al menos para mi era mi complicada, y con el estúpido sudor y cansancio de esa clase mi razonamiento a la una de la tarde se atrofiaba más de lo normal.
Los otros dos años de preparatoria, los estudié en Puebla, pero en la escuelucha en la que estuve, me obligaron a revalidar “educación física” ya en que el DF mi clase esa macuarra no era como tal “educación física”. Así que tuve que revalidar la tonta clase de deportes cumpliendo 30 horas en alguna actividad deportiva de la escuela (ya se que suena inverosímil y absurdo, lo es, lo es, pero tristemente es cierto), ¿qué seleccioné? Pues lo único para lo que no soy tan mala: ¡basketball! Además de hacerme cumplir esas horas, tuve que hacer un trabajo “teórico” sobre el deporte.
Resultado de toda esta tontería de revalidación: !Calificación de 8! ¿el argumento del profesor? Unas cuentas hojas en computadora y 30 horas de ejercicio no compensan un año de la clase de educación física. Quise aceptarlo, quise no molestarme, pero mis compañeras que sí habían tomado TODO UN AÑO de educación física, no eran capaces de hacer lagartijas correctamente, ni siquiera podían hacer un abdominal. ¿Sigue algo más molesto? ¡Sí! Meses después el profesor se dio cuenta que conocía a mi abuelo y tíos y me volví la consentida, pasé de ser una desconocida a “Silvinha preciosa”. De haber sido Silvinha meses atrás, no hubiese tenido que hacer ni trabajo ni horas de entrenamiento y hubiese sacado diez, se que esto suena muy mediocre y corrupto, pero estoy segura que hubiese pasado.
Universidad: NULA actividad deportiva, aunque mis justificaciones son que caminé, y no sólo con tenis sino con tacones, que comencé a bailar hawaiiano, y ya se que no es un deporte, pero para mi el hecho de sudar de forma asquerosa y quemar calorías implica de una u otra forma deporte (ajjajaja bueno, no, de hecho no, solo es para justificar mi sedentarismo)
Es por eso que hoy en la noche iré a comprar tenis adecuados para correr, así mañana cuando suene el despertador a las 6:00 am –y el hecho de saber que los tenis posiblemente me costarán mas de $50 dólares-, me sentiré obligada por el gasto y lista para trotar media hora en superficie plana, sudar, y sentirme mejor conmigo misma.
Lo he decidido por respeto a mi cuerpo, a mi salud y en parte porque aquí todo mundo es saludable; lo reconozco, es también una forma de sobreadaptación.