Poemas

"(...) te quiero porque tus manos trabajan por la justicia...",
dice un poema de Benedetti;
yo te quiero a ti,
adoro tus manos,
y sobre la justicia...
creo en ella.

"Me gustas cuando callas porque estas com ausente (...)",
así comienza el poema XV de Pablo Neruda;
el silencio de tus palabras
y el sonido de tu ausencia
son algunas cosas que me gustan de ti.

"Mientras por competir por tu cabello, oro bruñido al sol relumbra en vano (...)"
escribió Luis de Góngora y Argote hace muchos años;
hoy en el 2008 no utilizo alegorías para mi poesía,
pero amo tu cabello castaño.

"No es que muera de amor, muero de ti. Muero de ti, amor, de amor de ti, de urgencia mía de mi piel de ti (...)",
pensó Jaime Sabines y lo publicó en México;
en Vancouver, yo le doy la razón,
tengo urgente necesidad de tu piel.

"Verde que te quiero verde",
es el primer verso de un poema de Federico García Lorca;
yo te quiero con tu piel blanca
(!vaya que es blanca!)
y tus ojos azules.

"(...) nací para puta o payaso (...)",
es parte de un poema de Gloria Fuertes;
yo no me considero puta'
tampoco payaso,
pero adoro hacer el amor contigo
y que mis historias de la vida en México
te hagan reír.

Silvia Almanza Alonso
marzo 18, 2008.