lunes, agosto 12, 2013

Aún soy buena

Hoy sí tengo una historia positiva sobre los canadienses que contar. El sábado pasado luego de mucho mucho tiempo me sentí feliz y aceptada entre un pequeño grupo canadiense.  No me sentí presionada, ni fuera de lugar, ni tonta ni presionada a fingir ser alguien que no soy. Fue muy raro sentirme feliz, sin ninguna clase de ansiedad.

Y es que ya he llegado a dudar de mi misma en muchos sentidos; hay días que estoy convencida que me he vuelto mala y envidiosa, y aunque en el fondo sepa que no es cierto, en ocasiones estos sentimientos son tan fuertes que ya no sé qué pensar.  Pero este sábado confirmé que aún soy buena, que verdaderamente me alegra la felicidad de otros, que me alegran sus viajes, bienes materiales, experiencias y demás.

Hace años, solía pensar como Lorca "...yo ya no soy yo, ni mi casa es ya mi casa.." , y ahora, luego de años, también lo pienso muy seguido, sin embargo el sábado en mi casa me sentí feliz, me sentí como yo misma.




1 comentario:

Sil dijo...

Qué placer me da Silvia leer esto!!! Eso es la vida, una innumerable mezcla de sensaciones y sentimientos, que nos sorprende todo el tiempo y gracias a Dios, muchas veces gratamente, como a vos ese sábado. Ojalá que las personas que estuvieron contigo te hayan valorado y hayan sabido disfrutarte. No es fácil encontrar gente para conversar que nos enriquezca. Y contigo siempre ocurre eso. Un abrazote.